Papás mosquitos vs Papás faro

Por Rav Daniel Varón, Efshar Letakén – México.

1.- Introducción:
¿Cuántas veces al día nos encontramos en situaciones conflictivas con nuestros hijos?…
Repetidas veces nos pasa que los niños no quieren comer a la hora de la comida, o no se visten a tiempo y
se les va el camión… les rogamos que se levanten de la cama cuando suena el despertador, que recojan
sus juguetes, etc, y ellos no siempre hacen lo que quisiéramos que hagan.
Esto llega a tal grado que a veces ocasiona que los padres salen corriendo a la escuela con libros
olvidados en casa, escriben notas de excusa, llevan los tenis a la cancha de futbol, y llaman al entrenador
para demandar mejores posiciones en el equipo. En ocasiones, mientras el niño está durmiendo, los padres
están terminando la tarea del niño, la ropa está tirada hasta que mamá la cuelga. Tratamos de explicarles
con palabras, con cuentos, con consecuencias, con todas las maneras posibles y nada funciona. La
mayoría de las veces, esto crea tensión y conflictos, gritamos nos desesperamos…
Hagamos la suma, cuantas veces al día nos vemos enroscados en una situación conflictiva con nuestros
hijos … Todo esto suma, y va creando friccion en la relación, llevándola a un lugar diferente al que
quisiéramos…
El día de hoy les quiero compartir uno de los tips que cambio mi método de educación 180 grados, y nos
ofreció a mi esposa y a mi una mejor relación con nuestros hijos.

2.- Solución:
La guemara nos ofrece una solución, esta nos explica el siguiente concepto: ¨La responsabilidad no
puede caer sobre dos personas¨.
Lo voy a explicar con mis palabras: La responsabilidad es como un volante, no lo pueden tomar dos
personas.
Cuando tenía 15 años estaba en un coche en el cual dos personas tomaron el volante, ¿saben que paso?,
nos estampamos con un poste de luz, el coche quedo en pérdida total, yo me perfore la lengua y al de
al lado de mi le salvaron la nariz en una operación. Lo mismo pasa con la responsabilidad, no la pueden
llevar dos personas.
Las responsabilidades son como el volante, y los niños perciben perfectamente cuando los adultos ponen
las manos sobre el control de las responsabilidades del niño. En ese momento el niño quita sus
manitas del volante y deja que su papá o mamá manejen su vida, y se haga cargo de sus
responsabilidades, de tal manera que ellos ya no tienen por qué preocuparse. En su mente pasa ¨al fin de
cuentas no es mi responsabilidad, es de mis papás¨. Y esto es lo que crea toda la tensión y
desesperación…
En verdad el niño, no tiene intención de hacer sufrir a su mamá, no es un niño malo, simplemente percibe
que la responsabilidad de su alimentación recae sobre su mamá, ella es responsable por su comida, por lo
tanto, en este momento hay algo más importante – estoy jugando. El niño decide que no quiere comer y que
su mamá tendrá que lidiar con esa responsabilidad. Lo mismo en la mañana, si la responsable de llegar a la escuela es mi mama, en este momento estoy descansando y no puedo ayudarle, ella se preocupará por
que lleguen a la escuela independientemente si alcanzo el camión o no.
Pero si el niño sabe que la responsabilidad es únicamente de él, él tendrá que tomar el volante y
manejar.

Pongamos un ejemplo: Supongamos que llegó la hora de comer, el niño (de 6 ó 7 años) no quiere hacerlo,
porque está jugando o entretenido en otros asuntos. Normalmente insistimos en que coma, por lo regular llega
a un punto de conflicto etc. En la tarde al niño le da hambre y la mamá tiene que buscar la manera de
solucionar el problema para darle de comer a su hijo, esto genera otra frustración, y como dijimos, poco a
poco la relación se hace tensa. Nunca lo dejas de amar, pero si crea tensión. En cambio, si él supiera que
si no come a la hora determinada se quedará con hambre, automáticamente él tomará esa responsabilidad.
Puede ser que no funcione a la primera ni a la segunda vez, pero funcionará a corto plazo.
La responsabilidad no puede caer sobre los dos, y si el niño percibe que tú la tomaste, te la va ceder, por
que es muy cómodo que otras personas se encargen de nuestras responsabilidades.

3.- Papá mosquito vs Papá faro:
Existen dos tipos de papas, los ¨Papas mosquito¨ y los ¨Papas faro¨:
 Los Papás ¨mosquito¨ tienen 3 características:

  1. Se acuerdan la última vez que un mosquito no los dejó dormir toda la noche… cómo
    molesta… Los mosquitos tienen la capacidad de molestar e incomodar ilimitadamente, no se
    cansan y son muy pero muy molestos, y terminamos odiándolos. Lo mismo pasa con los
    papás mosquito, están todo el tiempo molestando atrás del niño, psssssssssss… a comer, a
    comer, a comer, a bañar, bañar, bañar… ya viene el camión, camión, camión… recoge tus
    juguetes, juguetes, juguetes… has la tarea…. es molesto.
  2. El mosquito absorbe la sangre. El papá mosquito absorbe las responsabilidades de sus
    hijos, y termina cargandola él.
  3. El mosquito daña a la persona, deja un piquete molesto, que da mucha comezón… El papa
    mosquito, más que un favor, está dañando al niño. Porque estos niños no entienden el
    significado de las consecuencias. Ellos asumen que los padres siempre estarán ahí para
    remediar la situación. No se toman seriamente las responsabilidades, después de todo, si mi
    mamá o mi papá se ocuparán de eso, entonces ¿por qué tengo que preocuparme?
    Pero eso no es la vida real, en un futuro cercano el niño estará lejos de casa, deberá
    responder a una autoridad superior y ser un esposo o esposa y padre que deberá cuidar a
    otros. Estos niños nunca aprendieron a pararse sobre sus propios pies. Ellos cederán ante la
    presión de las fechas límite, al tener que alimentar a un bebé en medio de la noche y ante el
    estrés inherente a la vida y las relaciones.
    No ayudamos a nuestros hijos cuando intervenimos constantemente, de hecho, lo contrario,
    les estamos haciendo daño. Ellos no sabrán cómo manejar la vida real, las decepciones se
    vuelven abrumadoras porque no saben tomar decisiones.
    Como decía Winston Churchill: “El éxito es tropezarse de fracaso en fracaso sin perder el
    entusiasmo”.

 En cambio, el papá ¨faro¨ tiene 3 características:

  1. Se queda en su lugar como el faro, no intensa al niño.
  2. Alumbra el camino, da la guía, enseña qué y cómo se hacen las cosas.
  3. Da al niño la oportunidad de ser responsable y aprender a lidiar con las circunstancias de la
    vida.

4.- En todas las edades:
Esto aplica para todas las edades… dese las necesidades más básicas cuando son bebes, hasta las más
complejas, aun cuando están casados.
Un muchacho que conozco estando en el aeropuerto para viajar a su luna de miel, se dio cuenta que se le
olvidó su pasaporte, y perdió el vuelo. El cambio de los vuelos y las conexiones le costó $40,000 pesos, al
papá le dio jaram y quería pagárselos para que él no tenga el gasto. Yo le dije al papá lo siguiente: ¨mira en
este momento te remuerde la conciencia de que está pasando tu hijo, y entiendo que lo quieras ayudar,
nada más que tienes que saber que dándole el dinero a tu hijo lo estas dañando, porque no le estas
dejando aprender a tomar su propia responsabilidad, y asumir las consecuencias de sus actos. Entonces
tienes una de dos, ver por tus propios sentimientos, estar tranquilo solucionando el problema de tu hijo, a
costas de hacerle un daño al muchacho, o sacrificar tu tranquilidad, aprender a vivir con el pendiente, y
hacerle un bien al niño orientándolo a ser responsable en la vida¨.

5.- ¿Cómo me convierto en papá faro?
Una vez que entendemos el concepto de estos dos tipos de papás, la pregunta es: ¿Cómo hago para
ser papa faro?, ¿Cómo hacemos para formar hijos exitosos?
Para esto, tenemos que trabajar en 2 áreas simultáneamente:
I) Respecto a la primera área, la práctica, debemos trabajar en lo siguiente:

  1. Estar dispuesto a trabajar fuerte e invertir tiempo y esfuerzo en tus hijos. Por qué a veces ser papá
    mosquito requiere menos tiempo, esfuerzo y es más confortable.
  2. Da un paso atrás, deja que tus hijos comentan errores, que experimenten fracasos y vean cómo
    ocurren las consecuencias naturales.
  3. Deja de arreglarle todos sus asuntos, en cambio, ayúdale a tu hijo a encontrar soluciones.
  4. Por lo tanto, nunca aceptes un “No puedo”. “No puedo” es un mito, es en realidad otra forma de
    decir “Puedo una vez que aprenda cómo”. El ¨no quiero¨ es menos dañino que el ¨no puedo¨.
  5. Intenta no expresar impaciencia si ellos trabajan a un ritmo más lento o no siguen tu ritmo.
  6. Habla sobre horarios de estudio, reglas de la casa y cumplir las responsabilidades acordadas.
  7. Aliéntalos a tomar la responsabilidad por sus actos y a pensar por sí mismos.
  8. Reconoce sus esfuerzos por ser mejores.

II) Respecto a la segunda área, la teórica, debemos trabajar en lo siguiente:

  1. Cree que tu hijo puede hacer cualquier cosa:
    Somos los críticos o aliados más influyentes de nuestros hijos. Ellos saben perfectamente si
    creemos en ellos y hasta qué punto confiamos en que ellos pueden ser exitosos. Si expresamos
    confianza, ellos lo sienten. Si dudamos de ellos, comienzan a dudar de sí mismos. Después de todo, ellos asumen que tenemos más experiencia en la vida y que supuestamente somos mejores juzgando a las personas.
  1. Siéntete orgulloso del éxito que proviene del esfuerzo, no de la falta de él.
    Muchos padres se sienten muy orgullosos de que sus hijos vuelan por la escuela sin mucho
    esfuerzo. Llenan a sus hijos de prestigio por “ser inteligentes”. De lo que ellos no se dan cuenta es
    que están enviando un mensaje implícito de que “esfuerzo” es un signo de falta de inteligencia y
    que “trabajar en ello” es lo que los estudiantes débiles hacen. Estos niños a menudo terminan
    intentando proteger su “identidad de inteligentes” alejándose de situaciones de aprendizaje que los
    ponen en riesgo de intentar hacer algo y potencialmente fallar.
    Estudios recientes demuestran que nuestra inteligencia crece mientras más estudiamos, más
    esfuerzo produce más inteligencia. Por lo tanto, la clave para criar niños altamente inteligentes es
    criar niños que trabajen duro. Alabar y reconocer su trabajo, y alejarse de las etiquetas.

En realidad hay mucho lo que aumentar en el tema, pero el formato no lo permite.
En caso de querer mas información, con muchisimo gusto lo haré, contactar al mail: dvaron99@gmail.com