Parashat Shminí: Aprovechar el llanto

Por Rav Igal Snertz

La Torá dice que todo el Pueblo de Israel tiene que llorar por la muerte de los dos hijos de Aharón: “col Beit Israel ivkú et hasrefá“.

¿Cómo se puede ordenar llorar por un tzadik que muere? Si no se siente tristeza en forma natural, no se puede forzar.

Explica el Netziv, que la forma de cumplir esta mitzvá es recordar los dolores personales, en estos momentos de duelo por el tzadik. Debemos aprovechar el llanto natural que se nos despierta cuando pensamos en nuestro dolor individual y llorar ahora, cuando se entierra al tzadik.

Se podría pensar que ese tipo de llanto no es sincero, que parece que se llora por la muerte del tzadik, cuando en realidad es un llanto por algún problema personal. En realidad, el hecho de llorar por su propio dolor, justo ahora en honor al tzadik, es muy valioso.

Apreciar el aporte que hace en el mundo un jajam, con su estudio de la Torá, es uno de los principios del judaísmo. El que no acepta este principio, puede perder su olam habá.

Lo ideal sería sentir, y no solo saber, este concepto. Qué despertaría en forma natural el llanto, por la partida del jajam. Pero si ese concepto todavía no ha penetrado en el corazón, no es una razón para no expresarlo, por lo menos, externamente y así, enunciar con orgullo nuestra emunat jajamim.  

Dentro de ese llanto, una tfilá en la que pedimos por nuestras necesidades personales, será muy bien recibida.